El Reino Unido hizo un llamado a reformas estructurales en la Organización Mundial del Comercio (OMC) durante el Consejo General celebrado en Ginebra en octubre de 2025.
En nombre del gobierno británico, el representante permanente ante la OMC destacó que las tensiones geopolíticas y las crecientes barreras comerciales ponen en riesgo la seguridad económica global y el funcionamiento de los mercados.
La declaración forma parte de la nueva estrategia comercial británica posterior al Brexit, que busca reforzar el papel del Reino Unido como una voz moderada y liberal en un escenario global marcado por disputas tecnológicas y la fragmentación de las cadenas de suministro.
Reformas y modernización de la OMC
El discurso británico subrayó que la OMC debe “adaptarse a las realidades del siglo XXI”, especialmente en áreas como el comercio digital, la inteligencia artificial y la sostenibilidad.
El Reino Unido defiende el fortalecimiento del sistema de solución de controversias, paralizado desde 2019, y propone nuevas normas para garantizar previsibilidad y confianza entre los miembros.
“Necesitamos una OMC más ágil, más transparente y más inclusiva”, afirmó el portavoz británico, enfatizando que el multilateralismo es “la mejor herramienta contra la fragmentación y el aislamiento económico”.
Londres también destacó el papel del comercio verde y de las inversiones en energía limpia e innovación tecnológica como pilares de la nueva agenda global.
Comercio digital e inteligencia artificial como prioridades
El Reino Unido propuso que la OMC lidere una agenda global sobre comercio digital, estableciendo estándares comunes de seguridad de datos, interoperabilidad y protección de la propiedad intelectual.
El país también quiere incluir la inteligencia artificial en la agenda de gobernanza comercial, defendiendo un equilibrio entre innovación y ética. “La IA puede impulsar el crecimiento global, pero requiere reglas compartidas que garanticen seguridad y confianza entre las naciones”, señaló el representante británico.
Riesgos geopolíticos y cadenas de suministro
El gobierno británico advirtió sobre la creciente instrumentalización del comercio internacional como arma política en disputas estratégicas. Según Londres, las interrupciones en las cadenas de suministro durante la pandemia y los recientes conflictos en Europa del Este y Medio Oriente demostraron la necesidad de resiliencia económica y cooperación internacional.
“La seguridad económica no es aislamiento, es interdependencia con responsabilidad”, afirmó el diplomático, al defender que los países fortalezcan las asociaciones regionales sin abandonar el sistema multilateral.
Alianzas y liderazgo británico
El discurso también reforzó el compromiso del Reino Unido con los países en desarrollo, proponiendo más apoyo técnico y financiero para ampliar su participación en el comercio global. Londres pretende utilizar su posición en el G7 y la Commonwealth para facilitar el acceso de las economías emergentes a los mercados y tecnologías limpias.
El gobierno de Rishi Sunak busca posicionar al Reino Unido como mediador entre bloques comerciales rivales, equilibrando intereses entre Europa, América del Norte y Asia-Pacífico.